El Diablo
Es la máxima representación del mal; toma los
nombres de el Putas, el Demonio, el Mandingas, el Diantre, el Ángel Malo,
Lucifer, Belcebú, Biruñas, Cantuña, Satanás y el Espíritu del Mal.
En la mitología universal el diablo está representado por un hombre negro,
ordinario y feo, con cuernos, rabo y pezuñas, que echa candela por los ojos,
armado de un largo tridente, con colmillos sobresaliente y enmarcado por una
carcajada medrosa, alimentada por las llamas que expide y el humo nauseabundo
que lo envuelve.
El diablo tienta tanto a hombres como a mujeres; tiene un alto poder sobre la
naturaleza material para obrar y suele tomar formas para salirse con las suyas.
Así puede transformarse en perro, mula, búho, tigre, murciélago, gato, toro,
gallina o pato; en fin, en lo que quiera para causar el mal. Solo un crucifijo,
la expresión “Ave María Purísima”, el agua bendita, el escapulario con la
imagen de la Virgen del Carmen, o el Santo Rosario lo pueden alejar.
LA NIÑA DE
LA CARTA
Cuentan que
es común, a orillas de las carreteras en algunos pueblos, ver una niña que
llora, con el rostro cubierto con un velo blanco y vestida con traje de primera
comunión.
La niña
lleva una carta en la mano. En el sobre está escrito un nombre y una dirección
que corresponde a una pequeña casa de campo de los alrededores del pueblo más
cercano donde se halla la niña.
Algunos
conductores, sorprendidos o conmovidos por el llanto de la niña, le resiven la
carta con el fin de entregarla a su destinatario. pero luego declaran que ni la
persona ni la dirección existen.
Una señora
dijo que la dirección era la misma del cementerio y que el nombre correspondía
al de una niña que años atrás había sido muerto el día de su primera comunión.
Otros han
declarado que al resivir la carta en manos de la niña, pierden el conocimiento
y caen sin sentido al piso.
Alguien llegó a decir que al
encontrar la lápida donde está enterrado el cuerpo de la niña, en la dirección
anotada, hayaron encima de ella el velo y el vestido de la primera comunión.
La Llorona
La
llorona convertida en el espíritu vagabundo de una mujer que lleva un niño
en el cuadril, hace alusión a su nombre porque vaga llorando por los caminos.
Se dice que nunca se le ve la cara y llora de vergüenza y arrepentimiento por
lo que hizo a su familia.
Quienes
le han visto dicen que es una mujer revuelta y enlodada, ojos rojizos, vestidos
sucios y deshilachados. Lleva entre sus brazos un bultico como de niño recién
nacido. No hace mal a la gente, pero causan terror sus quejas y alaridos
gritando a su hijo.
Las
apariciones se verifican en lugares solitarios, desde las ocho de la noche,
hasta las cinco de la mañana. Sus sitios preferidos son las quebradas, lagunas
y charcos profundos, donde se oye el chapaleo y los ayes lastimeros. Se les
aparece a los hombres infieles, a los perversos, a los borrachos, a los
jugadores y en fin, a todo ser que ande urdiendo maldades.
Dice la tradición que la llorona
reclama de las personas ayuda para cargar al niño; al recibirlo se libra del
castigo convirtiéndose en la llorona la persona que lo ha recibido. Otras
eversiones dicen que es el espíritu de una mujer que mató por celos a la mamá y
prendió fuego a la casa con su progenitora dentro, recibiendo de ésta, en el
momento de agonizar la maldición que la condenara: "Andarás
sin Dios y sin santa María, persiguiendo a los hombres por los
caminos del llano".
La Mohana
(Muana)
Es la hembra
del Mohán. Se dice que es bastante parecida a la Madre de Agua, pero se
diferencia de ésta porque es más agresiva. Persigue los niños hasta ahogarlos y
comérselos, sobre todo, cuando nadando en la orilla del río ensucian el agua. A
los bañistas y pescadores les voltea la canoa, los hunde y los devora
cortándoles la cabeza de un solo tajo. No permite que le revuelvan la
superficie del agua donde flota placidamente.
La Mohana,
como ya se advierte, es violenta y no tiene nada de juguetona ni embaucadora
como el Mohán. No sabe de brujerías como éste, ni fuma tabaco, ni le gusta la
sal; tampoco se transforma en tigre, oso o león, se presenta ofensiva, dando
alaridos estrepitosos antes de atacar a su victima. Es una mujer amargada,
vieja, esquelética, de pelo erizado y muy largo; dientes afilados, uñas encorvadas
y puntiagudas en forma de garra; boca enorme y desproporcionada; cabeza
cuadrada y ojos grandes y desencajados que chisporrotean a la distancia.
la primera quitenla plis
ResponderBorrarno
BorrarQue es una leyenda
ResponderBorrarIckkck -_-
BorrarQue es mito y leyenda
ResponderBorrarenserio no mames no sabes que es eso
BorrarO_O wtf